martes, 8 de diciembre de 2009

El juego

El juego a empezado y son pocos los que debes elegir. Algunos por y para siempre se mantendrán en el tablero, aunque sean escondidos, sin querer luchar contra otros por llegar a la final.
Fichas rojas, verdes, moradas, amarillas, blancas o negras, más miles de matices que podemos encontrar en la bonita vida de cualquiera.
Naces y el tablero impoluto se cruza en tu camino. Alcanzas con tu poca sabiduría los dados y comienzas apostando por aquella casilla o la otra.Ya no hay vuelta atrás, lo notaste?
Dando vueltas, queriendo llegar al punto con el que muchos jugadores soñaron, no alcanzando tal objetivo(o si?), ganando, perdiendo, tropezando, esquivando, queriendo y observando.
Comemos a los rivales, compartimos nuestro lugar con ellos y después los despreciamos.
Borramos las pistas, desaparecemos, encuentran nuestro paradero, las preguntas surgen entre cada uno de los vértices, paralelas y perpendiculares del sucio tablero que pisamos y dejamos que pisen cada día, pero nadie adivinaría nunca como llegaste a ese lugar desierto sin escalera que le acompañe.
Recuerdas mirando atrás cada uno de los movimientos efectuados, cada ficha, cada tirada de dados, cada uno de los maestros.

Miras hacia arriba e intentas respirar, mirando el cielo y esquivando el siguiente paso. Los dados están esperando y siempre debes tirar.

...


1 comentario:

Favio dijo...

es nuestro destino de mortales inocentes..
dejarse llevar por ese juego despiadado de dioses no?



parodia bonita, me gusta
:)